Pegue mi cuerpo al de ella, no quería dejarla ir, esta noche sería para mi. La necesitaba, necesitaba saber que no me he imaginado que ahí algo entre nosotros, que si existe el magnetismo que siento cuando la veo, cuando sonríe. Sus manos subieron por mis brazos lentamente para llegar a mi cuello y rodear lo. La recosté en la cama cayendo mi cuerpo sobre el de ella. Con sus manos acuno mi cara y profundizo aun mas el beso.
Comencé a dejar mi rastro de besos por su mandíbula, por su cuello, por sus hombros de izquierda a derecha y vise versa, ella no ponía resistencia. Su respiración cada vez era mas errática, sus gemidos consumidos por mis besos, sus manos bagaban por mi cuerpo atrayéndome mas a su cuerpo.
En un momento de lucidez me recordé que la puerta no tenia seguro y que no estábamos solos, me separe un momento de ella, le guiñe un ojo y ella dulcemente me sonrió. Se acomodo en la cama mientras yo pasaba el seguro y me sacaba la camiseta que llevaba puesta, al ver mis intenciones ella hizo lo mismo y me lanzo su blusa.
Me perdí en su mirada y me subí lentamente a la cama posando mi cuerpo sobre el de ella pongo una de mis piernas entremedio de ella, coloco sus manos por encima de su cabeza y las sostengo con una de las mías, comienzo a besarla nuevamente. Con mi mano libre comienzo a recorrer su cuerpo desde su vientre hacia sus hombros, volviendo hasta sus pechos, rozando mi pulgar por su pezón derecho. Ella gime en respuesta. Alterno mi trabajo al pezón izquierdo y la beso para retener su próximo gemido.
- Benjamín, me estas matando - Me dice cuando con mis manos comienzo a descender para acariciar su culo por sobre el pantalón.
- Shh -
Termine por soltar sus manos, y comencé un descenso con mi otra mano por su cuerpo mientras que con mi boca succionaba su pezón izquierdo, arqueo su cuerpo en reacción. Froto mi creciente erección contra su entrepierna y ella se apega mas a mi, sigilosamente llevo mis manos por su vientre para encontrar su pretina de pantalón y encaminarme hacia el botón, una vez que lo desabrocho, meto mis pulgares por los costados llevandolo hacia abajo, me separo de ella para terminar de sacarlos y ella vuelve a gemir mas fuerte.
- Shh, no estamos solos - Dijo cuando comienzo a subir con mi boca por su pierna derecha dejando suaves besos desde su tobillo hacia sus muslos. Jadeó en respuesta a mis caricias en sus piernas, subiendo y bajando adorándola por completo. - No sabes como había esperado esto. - Lleve mis dedos a su clítoris jugueteando con el, haciendo círculos, se retorcía bajo mis manos, gemía en respuesta.
La comencé a masturbar hasta hacerla llegar al orgasmo mismo. Se estremeció y comenzó a decir incoherencias, saque mi pantalón en un acto seguido y baje mis boxer, no podía perder un momento antes de que ella se arrepintiera nuevamente, ya me había pasado una vez. Abrió lentamente los ojos y quedo mirando mi erección. Mordio su labio inferior y tuve que contener la carcajada ante su expresión.
La asechaba como un león a su presa, me volví a recostar sobre su cuerpo nuevamente dejando mi pierna entre las de ellas para que pudiera sentir mi erección desnuda sobre ella, la rozaba con un lento movimiento mientras la besaba nuevamente.
- Voy a entrar en ti ahora, preciosa. Ya no puedo aguantar mas. - Susurre en su oído dejando una estela de suaves besos, levanto la cadera en señal de que me estaba autorizando. La roza la ultima vez para lubricarme con su humedad. Y la embestí, entre rápidamente y me detuve cuando ella lanzo un grito. No sabía si era dolor o placer. Pero me quede en esa posición.
- ¿Todo bien? - Pregunte - ¿Puedo moverme?.
Asintió con la cabeza u volví a salir de ella, esta vez ingrese mas despacio, ella levanto la cadera nuevamente para encontrarme y hacer que nuestros sexos chocaran.
Marcaba los movimientos una y otra vez, lentos, suaves, pero profundos. Renata inclinaba su cabeza así atrás con cada envestida.
~~~
Jamás pensé que las cosas con Benjamín se fueran a dar tan rápido cuando cerro la puerta la habitación sabía que esta vez no iba a ver vuelta atrás, no me arrepentía, no me arrepentiría nunca. Sus brazos, cada envestida que daba en contra de mi cuerpo se sentía maravilloso. Sentir su cuerpo rozando con el mio era algo que no podía describir, trataba de no gemir demasiado fuerte pero me era imposible estaba envuelta en la pasión, la calentura de la momento, sus manos recorriendo mi cuerpo, sus labios besando cada parte de mi.
Sabía que no había mañana. Tenia que tener claro que después de esta vez no habría mas. Estaba consiente de eso. Pero no quería que terminara el momento. En su ultima envestida antes de alcanzar su climax me beso con tanta pasión. Que nos corrimos al mismo tiempo. Dejo caer su cuerpo sobre el mio y rodó por el pequeño espacio de la cama para dejarme sobre el. Aun sentía su pene dentro de mi y como su semen corría por mis piernas. Con mi mano acaricie su pecho a la vez que deje caer un beso. Lo hizo estremecerse. Busco mi boca y me arrastro para que nuestras frentes se tocaran.
- Eres verdaderamente preciosa. - Me dijo cuando ya no podíamos seguirnos el ritmo de nuestra respiración.
- Gracias - Fue lo único que logre articular, no sabía por que le daba las gracias, pero sentí la necesidad de hacerlo, una pequeña sonrisa salio de su cara y me volvió a besar. Me coloco en la cama y el se acomodo tras de mi. Sus enormes brazos descansaron sobre mi, y con una de sus piernas cubrió las mías. Como si temiera que arrancara en ese momento.
Poco a poco me fui quedando dormida sintiendo su calor.
Mis ojos pesaban, sentía como si me hubiera ahorrado un coche. trate de moverme pero algo me lo impedía a regañadientes abrí un ojo y me encontré con un brazo de Benjamín, su barbilla apoyada en mi hombro y con los ojos muy cerrados, estábamos cubiertos por una colcha hasta la cintura y el con su brazo cubría mis pechos desnudos.
Suavemente comencé a mover su brazo de mi y el restrego su barbilla en mi hombro.
- Hmmm - Dijo sin abrir sus ojos.
- Necesito ir al baño - Le susurre.
- Hmmm - Volvió a repetir.
- Por favor, puedes soltarme. -
- Hmmm -
- ¡Benjamín! - Le dije esta vez mas fuerte y tratando de soltar su agarre.
- Veo que no despertaste de buen humor. - Dicho eso me soltó, me arrastre para el final de la cama y busque algo con que cubrirme. No puedo salir al pasillo desnuda, ni envuelta en una sabana. ¡Mierda! Como le explicare a Carol o Gabriel lo sucedido. ¡Doble mierda! Gabriel. Cubrí mi cara con horror de lo que pudieran pensar, y mucho mas de vergüenza de lo que escucharon anoche. Solo espero no haber sido muy escandalosa. Tome las bragas que había usado el día anterior y comencé a ponerme mis pantalones.
- Dijiste que solo ibas al baño - Dijo Benja, sentándose en la cama. Le di una rápida mirada, buscando las palabras correctas.
- Mentí, tengo que irme. - Me termine de poner los zapatos y camine hacia su lado para recoger el sujetador que estaba en el suelo.
- ¿Iras a verlo a él verdad? - Susurro
- Si, y no. Voy a mi casa a ducharme, cambiarme y preparar mi maleta. Luego de eso... No te debo explicación. - Termine de decir.
- No te las estoy pidiendo Renata, solo pensé. Bueno nada. Desayunamos primero. - Arrastrando la sábana se envolvió en ella y comenzó a acecharme.
- Gracias, pero no. Prefiero irme antes de que Gabriel o Carol se levanten. -
Acomodando mi blusa en su lugar me acerque a el le di un rápido beso en los labios y salí por la puerta, cerrandola tras de mi.
El apartamento estaba en silencio por lo que deduje que no estaban levantados aun, me metí al baño, tome una toallitas humedas que ahí había me limpie la entre pierna. Recordando todo lo que había sentido la noche anterior, sacudí mi cabeza, me arregle el cabello y salí para poder irme a mi casa.
- ¿No quieres quedarte a desayunar? - La voz de Carol salio desde la cocina, me encamine hacia ella.
- Gracias, pero no. Ya estoy muy atrasada. - Le bese la mejilla y salí sin mirar atrás.
Una vez arriba del coche encendí el Ipod en reproducción aleatoria y encendí el coche. La primera canción que sonó inmediatamente la cambie, no quería escuchar nada en relación al amor. No esta mañana. Las notas de Mientras tanto comenzó a sonar, saliendo del estacionamiento le di más volumen y comencé a cantar
- ¿No quieres quedarte a desayunar? - La voz de Carol salio desde la cocina, me encamine hacia ella.
- Gracias, pero no. Ya estoy muy atrasada. - Le bese la mejilla y salí sin mirar atrás.
Una vez arriba del coche encendí el Ipod en reproducción aleatoria y encendí el coche. La primera canción que sonó inmediatamente la cambie, no quería escuchar nada en relación al amor. No esta mañana. Las notas de Mientras tanto comenzó a sonar, saliendo del estacionamiento le di más volumen y comencé a cantar
"...A ver que le digo, Yo no soy adivino. Cualquier pronostico sería errático. Viene tiempos buenos, no lo dudo, pero que hacemos. Mientras tanto..."
En el primer semáforo revise mi móvil, dos llamadas de Naty, (Tienen que haber sido para avisarme que no llegaría a dormir. Cosa que ya sabía. Luego la llamo), dos más de Mariano. No quiero ni pensar para que son. Luego lidio con él. Y ni una de Benjamín Obvio para que me va a llamar si había salido recién de su cama. Pero algo en mi se sentía decepcionada. Esta vez no había salido huyendo tenia cosas que hacer. No es una buena excusa o si?.
"...Mientras tanto vivamos mientras tanto. Corramos en la lluvia, pies descalzos. Brincando de charco en charco. Mientras tanto busquemos a esa chica, la que nos tiene delirando. Robemosle el primer beso o unos cuantos. Mientras tanto..."
Jamás había prestado atención a la letra, solo me gustaba el cantante. Pero ahora todo traía a mis pensamientos a Benjamín. Todo me lo recordaba, sentía hasta su olor en mi piel. Apreté el botón para que pasara a la siguiente canción.
"... Iba tan tranquila por la calle, antes que... Iba tan tranquila por la calle, sin saber que vendrías tú.
Iba tan tranquila por la calle, antes que... Iba tan tranquila por la calle, sin saber que vendrías tú. Con tu mirada, tu caricia, tu sonrisa, tú verdad..."
- ¡Que todas las canciones me tienen que recordar a ti! ¡Maldita seas Benjamín! - Golpeando el volante con amabas manos. Pase a la siguiente canción. Oh, por favor que pueda escuchar una puta canción sin recordarlo.
En ese momento sonó mi móvil y baje el volumen dejando sonar la canción de Cafe Tacuba, Las flores. Miro el registro y era Mariano, aparque en una orilla para poder contestar ya que no andaba con mi manos libre.
- Buenos Días - Me dijo apenas conteste.
- ¿Como estas Mariano? -
- Bien, estoy camino al hospital. -
- Que bueno que descansaste anoche. -
- Si, me fui al departamento de Gabriel, y entrada la madrugada logré conciliar el sueño. Benjamín tenia una fiestesita. - ¿Que? Mierda, paso la noche bajo el mismo apartamento, escucho todo lo que paso en la habitación.
- Oh! Dormiste ahí - Logré articular.
- Si, te llame para ver si me podías dar alojo, pero no me contestaste, quise ir a tu apartamento pero luego, pensé que te podría molestar, no quiero subestimar mi suerte, creo que haces mucho con estar a mi lado a pesar de lo que te hice -
- No pienses en eso ahora, tú madre esta primero. -
- Lo se, corazón. A si que llame a Gabriel, me dijo que no había problema y dormí en el salón un rato, bueno después que a Benjamín se le acabaron las pilas. - Dijo soltando una risita.
- Ya veo. Emm... yo iré mas tarde a verte, voy camino... osea me acabó de despertar y tengo un par de cosas que hacer.-
- No te preocupes, el traslado estará listo a medio día, ya tengo todo listo para viajar en un avión que rente. Y Gabriel se viene conmigo. ¿Tú vendrás? -
- Si, pero se me hace imposible viajar hasta la noche, tengo que dejar todo andando en la empresa, y luego esta en nuevo cliente. La tengo complicada hasta la tarde. -
- Claro no hay problema. Pero era para prepararte una habitación en casa. -
- No, no sera necesario, me quedare en mi hacienda. Ya tengo todo listo con eso. - Le dije muy segura para que no intentara obligarme quedarme en la casa de Gabriel. Para mi aun era complicado volver a ese lugar después de tantos años.
- Esta bien. Te veo en la noche entonces. Te dejo un beso corazón. -
- Te veo luego. -
Corte la llamada sin estar segura de todo lo que había sido. Mientras yo me dejaba llevar por la pasión y la lujuria del momento Mariano dormía o hacía el intento de dormir en el sofá. ¿Por que Carol no me lo dijo?. Tanto les costaba. Mierda esto era algo con lo que jamás pensé toparme. Benjamín sabría que eso iba a suceder? Y si lo sabía por que no me lo dije, bueno estuvo conmigo en todo momento, como se supone que lo iba a saber. Va a quedar en shock igual que yo cuando lo sepa.
Arranque nuevamente el coche y le volví a dar volumen al radio. Esta vez sonaba Tranzas y Un nuevo amor. De solo recordar el nombre me daba risa.
La canción me recomendaba que debía buscarme un nuevo amor, una persona a la altura de las circunstancias. "...Que cuando muerda de celos él jamás te diga nada..."
- Creo que lo encontré -
"...Con quien mirar las estrellas. Alguien que pueda bajarte con un beso una de ellas, alguien que te haga sentir tocar el cielo con las manos, alguien que te haga volar como yo. No vas a encontrarlo..."
La música nunca había significado tanto para mi en estos momentos. Llegué a mi apartamento y todo lucia como había quedado el día anterior. No lo pensé dos veces y me fui directo a la ducha.
Al cabo de una hora con algunas cosas ya en una pequeña maleta, tome el móvil para llamar a Naty. Por la hora y el día debe estar en la oficina y como sus cosas están ordenadas debe haber pasado la noche con Ima, cada vez la veo menos, cada vez se menos de mi amiga.
- Extraña. Hola - Digo cuando me coge la llamada.
- Quien habla de extraña. -
- Ay! Cariño es que ya no pasas en el apartamento, todo es Imanuel para ti -
- Y tú estas celosa verdad? -
- Digamos que si, eres una idiota -
- Piensas venir a la oficina hoy? - Oh, ya usa su tono profesional
- Eso creo. Mas que nada por que tengo unos asuntos que tratar en personal -
- Y eso a que se debe - Pregunta un tanto intrigada.
- Ya lo sabrás. En una hora estoy por allá y te espero en mi oficina -
- Ja Ja! No parece tú oficina, es mas creo que nadie entra allí y nadie conoce a la jefa de la empresa. -
- Ya. Déjate de burlarte de mi. Y sigue con tu trabajo. Nos vemos en un momento. -
Una vez que corto la llamada echo una mirada en mi ropa. Luzco como cualquier cosa menos la dueña de una empresa. Saco algo mas formal de mi armario y me cambio de ropa nuevamente. Ahora si parezco algo mas como lo que soy.
Una vez en la empresa me gano todas las miradas de la gente, creo que lo que Naty decía era verdad. Nadie me conoce aquí. Luego de pasar 5 años metida casi todo el tiempo. Ahora casi ni vengo. Es que ahora tienes una vida.
Dentro de mi oficina reviso los correos importantes y reviso mi agenda, esta vacía. Nada de reuniones, nada de conferencias y nada de clientes. Bien creo que mi decisión de que Roxi ocupe un puesto mas alto después de todo es buena opción, se ha hecho cargo muy bien de mis asuntos.
Mi puerta se abre de golpe y veo a Mendoza parado en el umbral de la puerta.
- Que bien que la dueña se decidió venir a trabajar. - ¿Cual es su problema?
- Para algo soy la dueña. - Le respondo sarcásticamente.
- Eso no te da derecho a hacer todo esto una mierda, me fui de vacaciones y dejaste la cagada. - Me grita
- A mi no me gritas - Poniendo mis puños cerrado sobre el escritorio, para darme el impulso de ponerme de pie.
- Entonces hace las cosas bien, sigues siendo una chiquilla que no tiene conociemiento alguno sobre lo que es dirigir una empresa, estas llevando a la constructora a un hoyo y caeremos todos en ello. -
- ¿Que se supone que es lo que he hecho mal? - Le grito.
- Hay un montón de clientes que están en desacuerdo con los cambios realizados en sus proyectos. Los arquitectos de planta no saben por que cambias las ordenes que yo he dado. Y las compras de material. ¡Estas gastando una fortuna cambiando los materiales! -
- Claro que si, esos materiales no son de la calidad que se necesita. Eres un idiota si piensas seguir construyendo con esa clase de cosas. -
- Y crees que gastando mas es lo mejor? -
- Claro que lo es. O acaso prefieres que nos metan una demanda cuando sus edificios o casas se derrumben. -
- Llevo años haciendo lo mismo -
- ¡Pero a mis espaldas! Yo estoy a cargo, es MI empresa. - Le grito.
- No permitiré que nos mandes a la quiebra. -
- ¡Que es MI empresa! - si me grita, grito mas fuerte. No puedo dejar que me pisotee
- Eres una chiquilla de mierda, no sabes nada. Anda vuelve a tus vacaciones -
En ese momento la puerta del despacho se abre. Ambos nos giramos a la puerta y vemos a Benjamín parado hay, su mirada viaja entre mirarme a mi y a Mendoza a la vez. Ninguno de los dice nada, la cara de Mendoza es un poema, esta molesto, pero no lo dejare que mande a la mierda mi trabajo. No puedo dejar que siga trabajando con materiales que no son del todo los mejores, por abaratar costos pone en riego la vida de las personas y a su vez la credibilidad de las empresas que lo venden, no solo pierdo yo clientes, si no que todos perdemos. O por lo menos así lo veo yo.
Benjamín se acerca lentamente a mi lado, besando suavemente mi mejilla.
- Hola - Dice cuando ve que yo aun no reacciono y no dejo de mirar a Mendoza.
- Señor estamos en una reunión - Le dice Mendoza - Puede retirarse.
- ¿Una reunión? No fue lo que a mi me pareció - Le responde Benja
- Y que importa lo que a usted le parezca, salga de aquí y espere afuera. Que ni tu secretaria haga bien las cosas, y deje pasar así como así sin avisar.
- Ya bájale, déjate de idioteces y sal de mi maldita oficina. - Indicándole con el dedo la salida, respiro tres veces bastante fuerte y se dio media vuelta y salió.
Benjamín se quedo mirándome un segundo y camino a cerrar la puerta. Me regalo una sonrisa, y camino hacia mi nuevamente.
( http://www.youtube.com/watch?v=aerg-Msv6Zc ) Mientras tanto Tommy Torres
(http://www.youtube.com/watch?v=lzas_TSV7II) Quiero verte mas Francisca Valenzuela
(http://www.youtube.com/watch?v=IRqtSUOFLLY) Debes buscarte un nuevo amor Tranzas
por fiiinnnnn, ya juntos el pobre de benja ya la estaba pasando mal jajajja y q verguenzaaaa mariano estaba ahiiiii, sabra que fue nata?. y ese mendoza es un idiota mira q gritarle asi a su jefaaa q taradooooo.
ResponderBorrarme encantooo
Por fiiiiiiiiiiiiiiiiiin también decía Benja jajajaja, pobre hombre todo lo que tuvo que esperar.
BorrarMariano no tiene idea que era Nata la que estaba en la fiestesilla jajajaja. Mendoza nos dará un par de dolores de cabeza.
Me alegro que te allá gustado Sue, nos leemos el sábado.
Nada mas de imaginar la cara de Mariano si se entera qye la "firstecita" de Benaj era nada mas y nada menos que con Renata.....jajajajaja....al fin esos dos se dejaron llevar por la pasion...tienes razon ese Mendoza tiene "problemas" tatuado en la piel, pero bien por Nata que no se deja y lo pone en su lugar...t si no pyes llega Benja paea darle una manito. Me encanto nena
ResponderBorrarNos vemos en el prox cap :) .
Super Benja tiene que estar al rescate jajajaja. Ya nos iremos dando cuenta de algunas sopresitas. Y esperemos que Mariano no se entere aun que no tendría nada que decir. "A rey muerto Rey puesto"
Borrar