Y la bese, la bese con gozo, la bese como nunca había besado a una mujer, la bese con desesperación y con pasión. Ella llevo sus manos a mi cabeza en un acto echo por instinto, abrió sus labios para darle paso a mi lengua, que se volvía a reencontrar con la de ella. Su sabor era incomparable, quería conocerla más, quería besarla muchas veces mas. La levante y ella enredo sus piernas en mi cintura, solté una de mis manos para cerrar la puerta, y con ella sujeta a mi la lleve hasta el sofá. Lentamente la recosté apoyando su cabeza en el brazo del sofá, no separaba mi boca de la de ella, casi no podía respirar pero ese momento mágico no iba a terminar tan rapido. Y me separaba de ella, me echaría. Me diría mil cosas no eso no iba a sucedes.
Mis manos bajaban y subían por el costado de sus costillas, con mis dedos subía un poco su piel era tan suave, y ante mi tacto respondía tan bien, quería saborearla, quería besarla completa.
- ¿Que haces aquí? - Pregunto Nata entre besos, - ¿Como diste con mi dirección?
- Shh - le dije y volví a besarla. - No hables
Sentía como a través de la tela de su polera se le comenzaban a erizar los pezones, quería tenerlo entre mi dedos, entre mi boca. Subía aun mas mis dedos llevándome conmigo su polera, ella no hacia nada para detenerme. Se contraía aun mas hacia mi.
Libere su boca, y comencé a decender por su mandíbula, baje por su cuello, me trasladaba de derecha a izquierda. Gemía y jadeaba, con sus manos tiraba de mi pelo. seguía descendiendo en mi recorrido, y con mis dedos hacia círculos en su vientre, tenia que detenerme o esto se me iría de las manos, pero verla entregada a mi.
Me comencé a separar un poco de ella, me detuve, me volví a su boca. Ella bajo sus manos por mi espalda, dejando una huella de sus uñas a través de la chaqueta, me quemaba su toque. Llego hasta la pretina del pantalón y jalo la camisa fuera, introdujo sus manos por mi espalda. pasaba sus uñas como si estuviera dejando impregnada sus huellas digitales y llevando bajos sus uñas mi adn. Era un momento perfecto.
Acostumbraba a tener sexo con mujeres sin involucrar sentimientos, pero con Renata era distinto, había una atracción mayor.
Cuando sus manos siguieron bajando llego a mi culo y lo atrajo mas hacia ella, sintiendo mi creciente erección en su monte de venus.
- Necesito ir al baño - Le dije en un susurro a su oído. Sus ojos se abrieron tanto que pensé que se le saldrían de la cara, era el momento de parar. - Vengo un minuto.
Me separe completamente de ella, y me puse de pie. Su cara de confusión mezclada con excitación no tenia precio. No quería dejarla con las ganas pero necesitaba mi espacio o me la follaba hasta que perdiera la razón. Pero por el momento la segunda opción no tenia lugar.
- Mi habitación es la del fondo. - Me dijo incorporándose en el sofá.
~~~
Llegaba a mi casa sin ser invitado, le decía al portero que yo lo estaba esperando, sin siquiera decirme hola!, me besaba, me tocaba y yo lo dejaba sin protestar y cuando la cosa se ponía interesante me pedía ir al baño. Nada en este momento tenia una explicación lógica. Pero agradecía de alguna manera que allá parado la situación. No quería arrepentirme después. Yo no soy una mujer que allá tenido alguna vez sexo casual. Mi único hombre era Mariano y de eso ya un mes y medio.
Benjamín había provocado tantas cosas con su manera de besarme y su manera de tocarme, que estuve a poco de tener un maravilloso orgasmo con solo su toque. Pero no y ya no lo tendría.
- Que piensas preciosa? - Me dijo sacándome de mis pensamientos al momento que volvía del baño, clave mis ojos en su entre pierna y aun podía notar esa erección que había sentido. Se sentó a mi lado y me llevo contra su cuerpo, apoye mi cabeza en su pecho y el tomo el control comenzó a pasar los canales sin quedarse mas de dos segundos en alguno.
- Puedes dejar de hacer eso? - Le dije soltándome de sus brazos para sentarme mas lejos de él.
- Dejar de hacer que?, ven acá estaba cómodo contigo en mi pecho. Tomando mi brazo me volvió a dejar cerca de el y con mi cabeza en su pecho. - Así me gusta poder oler tu cabello, coco y leche. Buen elección en el shampoo.
- Benjamín, deja de actuar de esta manera, es obvio que has bebido, ¿Como conseguiste llegar a mi apartamento? -
- Te dije que quería verte, y no llegaste al bar, me tome dos copas esperándote. Y aquí estoy. - Apoyo su mentón en mi cabeza. - ¿Acaso no te gusto verme?.
- Deja tu ego, te dije que no iría, estoy cansada. -
- Bien, entonces nos vamos a dormir - Dijo Benjamín y se puso de pie. Me tomo en sus brazos y se encamino hacia la mi habitación.
- ¡Que! Bajame idiota, tú te vas. Yo no te he invitado a dormir. -
- Si me pusiera a esperar que tú tomaras la decisiones me haría viejo, creo que ya te voy conociendo preciosa. -
- Mira si eres idiota, ahora me bajas y te vas. - Lo único que conseguí fue que me apretara aun mas a el y con su boca buscara la mia para volverme a besar. - Benjamín ¿Que es lo que pretendes?.
- Por ahora que descanses, ya mañana tener a mi propia guia turistica para que me muestre la ciudad. -
- ¡Que! no, yo tengo cosas que hacer, no te voy a andar paseando por la ciudad. Si quieres te doy el numero de alguien que feliz lo haría. -
- No quiero el numero de nadie, quiero que seas tú y lo harás. Por que de aquí no me voy. - Tirando con una mano la colcha de la cama y dejandome dentro de ella, se comenzó a sacar la chaqueta dejandola sobre el mueble y comenzó a desabrocharse la camisa, que tuvo el mismo fin. Se sento en el borde de mi cama y se quito los zapatos, luego los calcetines y se desabrocho el cinturon del pantalón.
- Hey, que haces? - Le pregunte sin poder dejar de mirar su torso desnudo.
- ¿Que crees tú? No pensaras que voy a dormir en la sala o con ropa - Me dijo casi conteniendo una carcajada. - Además tu cama es grande, ni me sentirás. - Y soltó la carcajada.
- Te dije que te fueras, no quiero compartir ni la cama, ni la sala, ni nada contigo. -
- No era lo mismo que pensabas hace un rato en la sala, estoy seguro que si no me hubiera detenido a estas alturas ya te tendría pidiendo mas. -
Esas palabras provocaron que me hirviera la sangre que mierda se creía para decirme eso, con otras palabras me estaba diciendo que no se demoraría nada en tenerme con las piernas abiertas. Claro que no era verdad.
- Colmaste mi paciencia, quiero que te vallas en este mismo instante de mi casa, si no lo haces llamare a la policia, a Gabriel y a todo el mundo diciendo que me trataste de violar. -
- Hazlo, por que yo no me iré. -
Ante tal frustración salí de la cama y me encamine hacia el baño y cerré fuerte la puerta, y pase el seguro. Abrí el grifo del agua, me saque la pijama y me metí en la ducha esperando que cuando saliera se hubiera ido por fin, lo quería lejos y cerca, besandome y odiandome, mis emociones mis sentimientos estaban todos revueltos. No podía dejar que pasara la noche conmigo, aun que solo fueramos a dormir, como le explicaria a Naty la situación, como le explicaria a mi corazón la situación.
Salí del baño a buscar algo para dormir envuelta solo en la toalla y recordé cuando llego al hotel sin ser invitado, cuando le abrí la puerta solo envuelta en toalla. Una sonrisa salio en mi cara. Al abrir la puerta me encontre a Benjamín cómodamente acostado en mi cama boca abajo, parece que me había tardado mas de lo normal por que se veía placidamente durmiendo.
Mis ganas de echarlo a patadas se esfumaron fui hasta el cajón y saque una camiseta limpia y un par de bragas, era mi cama, podía dormir como quisiera.
Me acerque a la cama, suavemente me deslice y me cubrí, apague la luz de la lampara y hundí mi cabeza en la almohada esperando que él no se despertara y hiciera mas difícil esta situación.
- Buenas Noches. - Le dije casi en un susurro.
Empecé a procesa como fue todo el día un gran suspiro y me caí en un profundo sueño.
Una presión en el pecho me dificultaba respirar, sentía mis ojos pesados, y por mas que trataba de abrirlos no podía, a lo lejos sentía que me llamaban, pero no podía ver quien lo hacía por mas que caminaba hacia donde se escuchaba la voz, esta cada vez se alejaba aun mas. Corría pero me era imposible apurar mas el paso. De pronto de entre las sombras salió una persona, no sabía por que huía, volví a tratar de correr, pero por mas esfuerzo que hacia me era imposible, bajaba mi vista al piso para no tropezar. Los latidos de mi corazón se escuchaban en todos lados, era el único sonido.
- No me huyas, no te haré nada. - me decía esa voz, una voz ronca, me daba miedo. Tenía miedo. - Ven acá, ven deja de correr es inutil - me volvía a decir, de pronto sentí como unas manos se apoderaron de mis brazos. Grite, grite pero no me soltaban.
- Renata, tranquila estoy aquí - Desde alguna parte escuchaba una voz dulce, preocupada. - Ven preciosa, tranquila abre esos hermosos ojos. ¡Mírame! - Me decía con mucha insistencia.
Un sollozo salio desde el fondo de mi pecho y las lagrimas comenzaron a salir sin pedir siquiera permiso. - Shhh, tranquila estoy aquí contigo, nada malo va a pasar, era solo un sueño.
Lentamente levante mi mirada hacia el quien me tenia entre sus brazos bien firme, con su cuerpo me emanaba calor, un calor que necesitaba por que temblaba. Me aferre a él, lo afirme mucho mas, tenia mi cabeza apoyada en su pecho.
- Estoy bien, solo fue un sueño - Le dije para tratar de calmarlo.
- Voy a traerte agua. - Al momento que me soltaba un poco pero me aferre mas a él. No quería tenerlo lejos, lo necesitaba, necesitaba sentirme segura y en sus brazos lo hacía.
- No, no quiero agua. No me dejes sola. - Le susurre en el pecho.
- No te dejare sola. Pero necesitas tranquilizarte. -
- Solo abrazame, eso es lo que necesito. -
- Eso no tienes ni que pedirmelo, ahora trata de dormir nuevamente prometo velar tus sueños. -
Comenzó a acariciar mi cabello con una de sus manos y con la otra bajo hacia mi espalda dejando rastros de círculos sobre ella. Entre sus brazos me volví a quedar dormida esperando esta vez no volver a tener esas malditas pesadillas.
~~~
Después de que a mitad de la noche Nata comenzara a moverse y tuve que despertarla para que saliera de esa horrible pesadilla que la hacia respirar con dificultad, logre a base de caricias poco sexuales que volviera a dormir, sus brazos estaban aferrados a mi, notaba el miedo que sentía, estire un poco mi brazo para tomar el móvil de ella. Revise la hora y eran las 05:45 de la madrugada, faltaba poco para que amaneciera, pero yo no pude volver a conciliar el sueño. Me quede mirándola como dormía, como subía y baja su pecho aferrado a mi, como si temiera que algo malo le podría pasar.
Que ganas de estar en su cabeza y saber que es lo que la atormenta - me dijo mi conciencia.
A las 8 de la mañana cansado de estar en la cama removí sus brazos de mi pecho lentamente, para no despertarla. Su pierna entrelazada en las mías me dificulto mi trabajo y ella comenzó a moverse, lentamente sentí como se le volvía a acelerar la respiración.
- Tranquila, sigue durmiendo solo voy al baño - Le dije cuando refregaba su cabeza en mi pecho.
- ¿Despertaste hace mucho? - susurro.
- No, mi vejiga me despertó - le mentí no quería decirle que no me había vuelto a dormir. Eso solo la atormentaría mas - Anda quita tu pierna de mi entrepierna.
En un rápido movimiento saco su pierna de encima de mi y se cubrió con vergüenza la cara.
- Perdón - Dijo y cerré la puerta del baño tras de mi.
Cuando volví al dormitorio ella ya llevaba ropa deportiva puesta y un tomate desarmado en el pelo, el pantalón le favorecía bastante se le veía aun mas grande el culo, no pude evitar dejar mi mirada fija en esa parte de su cuerpo y ella se dio cuenta, me lanzo un cojín de la cama y se largo a reír.
- ¿Quieres tomar desayuno antes de irte? - Me pregunto mientras sacaba del armario un canasto con ropa sucia.
- Si, me encantaría. Pero me recuerda que vamos a salir a si que ve a ducharte y cambiarte. -
- Te dije ayer que no podía, he quedado para comer con Naty y luego iremos a buscar a Carol para salir. Ya sabes tiempo de chicas. - Me dijo con la mano arreglando un mechón que se le había salido de su peinado
- Las cancelas. -
- No lo haré y no vuelvas a insistir. - Y salio de la habitación.
Aproveche ese momento para ponerme mis pantalones y salí tras ella. Cuando iba a ingresar a la cocina la puerta de entrada del apartamento se abrió y una joven acompañada de un hombre hicieron ingreso.
- Buenos Días - Dijo la chica que lanzaba las llaves sobre la mesa al costado de la puerta, no la había notado anoche. - Renata ya se levanto? -
- Si. - Fue lo único que dije.
- Ima, espérame aquí unos minutos voy por mis cosas y nos vamos. - Le dijo al joven y salio por el pasillo.
- Bueno Naty no nos presento, Me llamo Imanuel soy el novio - Dijo el joven estirándome la mano en modo de saludo.
- Un gusto Imanuel, soy Benjamín -
- Hace cuanto conoces a Nata - Pregunto mientras caminaba a tomar asiento en el sofá. - Por que no te había visto por acá.
- Hace unos meses. - En ese momento apareció Renata a quien se le desfiguro la cara al verme sentado en sofá con el torso desnudo, descalzo y conversando con el novio de su amiga.
- Ima, que sorpresa, Naty esta aquí - Pregunto luego de darle dos besos en las mejillas, dos besos. y a mi ni siquiera los buenos días.
- Si, fue a buscar las cosas, olvidaste que hoy habíamos quedado de ir a hacer surf -
- Perdón lo había olvidado. - Dijo pasandose las manos por el cabello
- No importa, ya Iñaki podrá llevarte después, supe que pasaron todo el día juntos - Dijo guiñando un ojo hacia ella.
- Si siempre me la paso super bien con él. - Dedicandole una sonrisa y acomodandose a mi lado en el sofá - Pero solo somos amigos y él lo sabe. -
- Claro, solo son amigos - Los comentarios del joven me estaban molestando mas de lo normal y la actitud de ella igual.
- Renata, me voy a ir a desayunar con Gabriel. Te veo mas tarde. - Le di un beso en la cabeza y camine a su habitación me metí al baño para poder asearme un poco y luego me vestí.
Cuando abrí la puerta del baño ella estaba sentada en la punta de la cama esperandome.
- Me dijiste que desayunariamos juntos ¿Que paso? -
- Nada, cambie de planes. Tú deberías arreglarte para irte a la playa con tú amigo . -
- Ya se fueron - Me dijo y camino hacia mi.
- Bueno, yo también me iré. -
- Quedate - Me dijo y se con sus manos saco la camisa que acababa de meter dentro del pantalon.
Comenzo a juguetar en mi abdomen con sus manos.
- Detente - Le dije y saque sus manos de mi cuerpo. - No comiences algo que después no terminaras. -
- Quien dijo que no lo iba a terminar - Se puso de puntillas y comenzó a besarme de la misma manera de como lo había echo ayer por la mañana en el estacionamiento.
Que ganas de estar en su cabeza y saber que es lo que la atormenta - me dijo mi conciencia.
A las 8 de la mañana cansado de estar en la cama removí sus brazos de mi pecho lentamente, para no despertarla. Su pierna entrelazada en las mías me dificulto mi trabajo y ella comenzó a moverse, lentamente sentí como se le volvía a acelerar la respiración.
- Tranquila, sigue durmiendo solo voy al baño - Le dije cuando refregaba su cabeza en mi pecho.
- ¿Despertaste hace mucho? - susurro.
- No, mi vejiga me despertó - le mentí no quería decirle que no me había vuelto a dormir. Eso solo la atormentaría mas - Anda quita tu pierna de mi entrepierna.
En un rápido movimiento saco su pierna de encima de mi y se cubrió con vergüenza la cara.
- Perdón - Dijo y cerré la puerta del baño tras de mi.
Cuando volví al dormitorio ella ya llevaba ropa deportiva puesta y un tomate desarmado en el pelo, el pantalón le favorecía bastante se le veía aun mas grande el culo, no pude evitar dejar mi mirada fija en esa parte de su cuerpo y ella se dio cuenta, me lanzo un cojín de la cama y se largo a reír.
- ¿Quieres tomar desayuno antes de irte? - Me pregunto mientras sacaba del armario un canasto con ropa sucia.
- Si, me encantaría. Pero me recuerda que vamos a salir a si que ve a ducharte y cambiarte. -
- Te dije ayer que no podía, he quedado para comer con Naty y luego iremos a buscar a Carol para salir. Ya sabes tiempo de chicas. - Me dijo con la mano arreglando un mechón que se le había salido de su peinado
- Las cancelas. -
- No lo haré y no vuelvas a insistir. - Y salio de la habitación.
Aproveche ese momento para ponerme mis pantalones y salí tras ella. Cuando iba a ingresar a la cocina la puerta de entrada del apartamento se abrió y una joven acompañada de un hombre hicieron ingreso.
- Buenos Días - Dijo la chica que lanzaba las llaves sobre la mesa al costado de la puerta, no la había notado anoche. - Renata ya se levanto? -
- Si. - Fue lo único que dije.
- Ima, espérame aquí unos minutos voy por mis cosas y nos vamos. - Le dijo al joven y salio por el pasillo.
- Bueno Naty no nos presento, Me llamo Imanuel soy el novio - Dijo el joven estirándome la mano en modo de saludo.
- Un gusto Imanuel, soy Benjamín -
- Hace cuanto conoces a Nata - Pregunto mientras caminaba a tomar asiento en el sofá. - Por que no te había visto por acá.
- Hace unos meses. - En ese momento apareció Renata a quien se le desfiguro la cara al verme sentado en sofá con el torso desnudo, descalzo y conversando con el novio de su amiga.
- Ima, que sorpresa, Naty esta aquí - Pregunto luego de darle dos besos en las mejillas, dos besos. y a mi ni siquiera los buenos días.
- Si, fue a buscar las cosas, olvidaste que hoy habíamos quedado de ir a hacer surf -
- Perdón lo había olvidado. - Dijo pasandose las manos por el cabello
- No importa, ya Iñaki podrá llevarte después, supe que pasaron todo el día juntos - Dijo guiñando un ojo hacia ella.
- Si siempre me la paso super bien con él. - Dedicandole una sonrisa y acomodandose a mi lado en el sofá - Pero solo somos amigos y él lo sabe. -
- Claro, solo son amigos - Los comentarios del joven me estaban molestando mas de lo normal y la actitud de ella igual.
- Renata, me voy a ir a desayunar con Gabriel. Te veo mas tarde. - Le di un beso en la cabeza y camine a su habitación me metí al baño para poder asearme un poco y luego me vestí.
Cuando abrí la puerta del baño ella estaba sentada en la punta de la cama esperandome.
- Me dijiste que desayunariamos juntos ¿Que paso? -
- Nada, cambie de planes. Tú deberías arreglarte para irte a la playa con tú amigo . -
- Ya se fueron - Me dijo y camino hacia mi.
- Bueno, yo también me iré. -
- Quedate - Me dijo y se con sus manos saco la camisa que acababa de meter dentro del pantalon.
Comenzo a juguetar en mi abdomen con sus manos.
- Detente - Le dije y saque sus manos de mi cuerpo. - No comiences algo que después no terminaras. -
- Quien dijo que no lo iba a terminar - Se puso de puntillas y comenzó a besarme de la misma manera de como lo había echo ayer por la mañana en el estacionamiento.