martes, 17 de diciembre de 2013

"Algo llamado amor" Cap XXXIV

Las siguientes dos semanas fueron un caos en mi vida, a pesar que ya se habían desaparecido por completo los hematomas, y como como habíamos quedado al día siguiente de haber dicho que me quería casar con él, nos levantamos y nos fuimos directo al Registro Civil, la fecha ya estaba y solo tenia 3 semanas para organizar todo y obvio Benja tenia que ayudarme.
A los cuatro días ya no aguantaba mas el encierro y decidí ir a la oficina. MALA IDEA con todas sus letras, era un caos, un asqueroso caos. Esa semana nos daban los resultados de los examenes y queríamos estar claros del paso a seguir. Mi abogado trato por todos los medios de hacer que Mendoza decidiera quedarse con el porcentaje en acciones y un puesto de trabajo, pero claro el maldito me quería ver hundida.
Los días seguían pasando y yo aun estaba instalada en casa de mi amor, no me atrevía ni siquiera a entrar a mi apartamento por lo que le pedí a Benja que fuera a buscar algunas cosas y otras se las pedía a Naty, quien estaba demasiado distante de mi, por mas que la buscaba para comer o poder conversar con ella, siempre me daba alguna escusa. Cuando le conté que le había dando el si, y que ya teniamos la fecha de la boda, solo se limito a decirme te felicito. Me dolía no tener a mi mejor amiga a mi lado, a mi hermana. Y buscaría la manera de hablar con ella, necesitaba saber que le pasaba.
Benja por otro lado me había comentado que él tendría que viajar a Barcelona por un par de días para solucionar un tema, me dijo que me fuera con él a lo cual mi respuesta fue un no.

      - Mi amor con todo lo de la boda, la empresa. No puedo irme contigo ni por dos días. -
      - No quiero dejarte sola mi amor, te vienes por que te vienes - 

Fue una pequeña discusión la que termine perdiendo, al final le dije que si. Pero con la condición que fuera luego de la lectura del examen, accedió. Una noche después haber echo el amor suave y delicadamente me comento que tal vez el podría ayudar con él tema de dinero en la empresa, comprar el 25% de acciones así la empresa seguiría a mi mando y no sufriríamos ningún problema financiero. A pesar que su propuesta me gusto bastante le dije que tendríamos que ver los temas legales, y dejar claro que a pesar de pronto seríamos uno solo, lo de él era de él y lo mio era mio. Un pensamiento un tanto egoísta de mi parte pero que al comentárselo a mi abogado me aconsejo que siguiera así.

      - A pesar que esa parte de la empresa sería mía. Seguirás a cargo de tomo amor. Lo que quiero es que estés tranquila y que una vez que nos casemos pase eso a tu nombre. Sera como mi regalo de matrimonio. - 

Con Gabriel habíamos quedado en que él por la mañana cuidaba a Renata y yo me quedaba con ella por la tarde entonces mi horario de oficina era muy flexible y siempre hacíamos cosas entretenidas. Ya me urgía ser la mujer de Benja para llenarme de hijos, quería los míos propios. Aun que aun no se lo había comentado, me embarazaría tan pronto como estuviéramos casados. Lo que me parecía un poco extraño era que a llevabamos mucho tiempo teniendo relaciones y jamas nos habiamos cuidado, ni él ni yo. Cuando tiempo atrás se lo comente a Naty, me dijo que era una suerte, pero ahora ya me estaba entrando la duda de ese tema, otro punto a comentar con mi amor.

La mañana del día de la lectura, mi amor dijo que venia conmigo a la oficina y estaría presente en la lectura y en ese momento le ofertaría una suma de dinero a Mendoza por su parte.
A las 10 de la mañana estábamos en la sala de reuniones esperando la llegada de Mendoza quien venía con un pequeño retraso, una hora. genial.

      - Tranquila mi amor, todo estará bien. - susurro Benja en mi oído. - Luego de esto nos vendrán pero muy bien esos días en Barcelona, sera casi nuestra luna de miel - Solo me limite a asentir

Media hora después con todos las personas en la mesa de reuniones, se dio inicio por fin. Hablaba mi abogado con respecto a lo que pasaría dependiendo del resultado y hablaba su abogado solicitando la apertura lo antes posible, y que ya habían decidido que no les salia conveniente quedarse con acciones en la empresa puesto que siempre yo sería la ultima palabra, como era de suponer querían el dinero lo antes posible. Benjamín aprovecho ese mismo momento para hacerle la oferta de pagarle su parte sin necesidad de intervenir los fondos de la empresa. Pero Mendoza lo ignoro en todo momento.

      - Vamos a pasar a abrir el examen. Si todas las partes están de acuerdo -
      - Adelante - dije fuerte y claro tomando asiento en la parte principal de la mesa, a mi derecha mi amor, y a la izquierda mi abogado
      - Espere... - dijo Mendoza - Esto es algo formal y en el último caso familiar. -
      - Así es - dijo el ministro de fe
      - Que salga ese hombre entonces. No tiene nada que hacer acá - dijo en contra de Benja.
      - Es mi prometido. A demás de un posible comprador de acciones - dije para evitar que lo sacaran. No me sentía segura sin él a mi lado. - No veo el problema
      - Si fuera su marido - se detuvo - No habría inconveniente de tenerlo acá, pero al no serlo y al estar una parte en contra se le pide al señor que se retire de la lectura del examen y documentación legal - vuelve a decir el ministro.

Benja me besa la cabeza y sale sin decir nada mas de la sala, fulmino con la mirada a Mendoza quien rebosa de una gran sonrisa, como sintiéndose triunfador.

      - Bien, Ahora si demos inicio - acoto. - Procesa ministro
      - Buenas Tardes, estamos aquí debido a que ambas partes solicitaron un examen de ADN, este examen como ambas partes lo saben se tomo en un lugar neutral y bajo la supervisión de un ministro de fe, para así evitar malos entendidos y por sobre todo la duda que el resultado sea el correcto. A petición del Señor Ricardo Mendoza, quien acredita ser hijo del señor ya difunto Lorenzo Blavi's. Como pudimos constatar con algunos testigos anonimos de ambas partes. Ellos afirman que ahí un parentesco de padre e hijo. Por su parte la Señorita Renata Blavi's quien ignoraba todos estos hechos hasta hace un par de semanas atrás, pidió el examen para así hacer efectiva la demanda donde dice que el 25% de la constructora que fue dejada como herencia paterna, pase a manos del Señor Mendoza. Sin mas preámbulos daremos paso a leer el resultado. Y luego explicar lo que sigue a continuación. -

Una vez que el ministro termina de decir su pequeño discurso veo como rasga el sobre delante de nuestros ojos, mis manos me sudan completamente no por él hecho de que valla a perder una parte de la empresa, eso es lo que menos me importa, es mas bien el hecho de que mi padre me oculto cierta información que resulta ser bien importante para ambos.
Vuelve a tomar la palabra el ministro y lo único que escucho son murmullos, no por que no le este prestando la atención necesaria, si no por que termino siendo positivo.
Resulta que el hombre que tengo delante de mi es mi hermano, es mi hermano paterno. Este idiota es mi hermano no me lo puedo creer. La historia que me contó realmente terminaría siendo cierta. Mi padre había roto su familia por mi madre y luego por mi. No puedo creerlo tan poco hombre, la forma que tenia y su figura esta hecha mierda.
Me pongo de pie a mitad del discurso donde habla pura mierda, mis abogados tendrán que tomar el asunto en sus manos, mis ojos comienzan a picar y como es obvio para una mujer lo único que puedo hacer es llorar, no por pena. Es frustación es rabia y es decepción de la única figura segura que tuve a mi lado.
Puede ser que todo en esta vida, sea todo una maldita mentira.

      - Hermanita por favor, no seas así y termina de escuchar al señor - se burla Mendoza, mientras camino hacia la puerta.
      - ¡Cierra tu maldito pico! - le grito cerrando con un gran portazo.

Llegué al pasillo y me temblaban las piernas, estaba destruida mental y físicamente, dos pasos mas adelante y me desplome junto a la pared y me tape la cara con ambas manos.

      - Shhh - los brazos de Benja me rodearon en el suelo - No llores amor. Todo va a estar bien. Vamos te llevo a casa
Me ayudo a ponerme de pie y me sostuvo contra su pecho por un momento, acariciaba suavemente mi pelo y me besaba la cabeza, hizo que el momento fuera a pesar de doloroso, muy tierno y especial.
     - Vamos - me dijo pasando su brazo por mi cintura. - Un baño te ayudara a relajarte y pensar con claridad. - me susurro

Mientras esperábamos el  ascensor apareció mi abogado quien le dijo directamente a él que no me podía retirar hasta que se allá terminado la lectura y todas las formalidades, que era mejor que entráramos nuevamente y termináramos con todo esto de una maldita vez. Benja le puso la condición de que él pudiera entrar ya que no me dejaría sola.
Al cabo de unos minutos el abogado volvió a salir dándonos de entrada la mala noticia de que no era posible su ingreso, Benja se rehusó, e ingreso conmigo de la mano.

      - Y que te quede claro. - le dijo de entrada apuntando a Mendoza - Me pides que salga, ella sale conmigo -
      - A mi me favorece que se valla - le dijo en tono burlón - Así puedo usar pedir mucho mas
      - Eso es lo que quieres - dijo ayudándome a sentarme en la cabecera de la mesa - Pues da el momento, acá y frente al ministro. Da el maldito monto que quieres y mañana a primera hora lo tendrás. Pero deja a Renata en paz de una maldita vez.
      - Podemos proseguir - acoto el ministro de fe - Necesito terminar de una vez. Para que luego ustedes vean los pasos a seguir de cada uno
      - Disculpe prosiga - dijo Benja, dándome un apretón de mano. Seguridad. Eso es lo que me estaba dando.

Media hora después ya había terminado la tortura de escuchar a ese hombre hablando de bienes y de reparticiones, cuando se pudo tomar la palabra Benjamín le ofreció que pusiera el monto por su parte, con la condición que no volviera a aparecer mas y dejara su demanda hasta ahí. Mendoza pidió dos días para pensarlo y dar su respuesta. Esto aun no acaba
Mi abogado me aconsejo mantenerme al margen hasta que ellos arreglaran eso y si no aceptaba nos contactabamos nosotros con el y le haciamos nuestras dos oportunidades de oferta.


~~~

El día para mi Renata había sido de lo mas asqueroso, esperaba que ese idiota tomara la decisión correcta y aceptara el dineral que le iba a pagar, estaba claro que por la tranquilidad de ella no escatimaria en gastos y estaba siendo bastante generoso. 
La lleve de vuelta al departamento y la invite a cenar para que se sintiera mejor, llame a Gabriel para ver si se nos unia y me comento que si no había problemas de que fuera con Mariano. Ya a estas alturas el no era un problema para mi y estaba seguro del amor de Renata por lo que retomar nuestra amistad no sería problema. Mientras ella se daba una ducha y elegía que ropa vestir llame a Naty, tal vez verla también iba a ser bueno. Al tercer tono me contesto

      - Benjamín ¿Todo bien? - pregunto seca.
      - Si. Renata esta mucho mas tranquila -
      - Que bueno ¿Que necesitas? -
      - Vamos a ir a cenar al restaurant del Hotel W, pensaba si te nos querías unir. -
      - Yo... - estaba algo nerviosa - No puedo Benja. -
      - A Renata le haría muy bien saber que cuenta contigo - le acote
      - Ella sabe que cuenta conmigo. Pero no puedo de verdad Benja - desde hace días que venia notando que ellas estaban un poco distanciada, evite incomodar a Renata con el tema y no le pregunte nada - Estoy liada entre mis sentimientos y mi mejor amiga, no se como llevar esta situación, espero que puedas entenderme al menos tú -
      - De que va todo esto? - le pregunte aun mas intrigado - Es sobre tu relación con Imanuel?
      - Mi relación - resopla - Estoy entre el amor y la amistad
      - ¡Y una mierda! - le grito - No puedes sentirte de esa manera. Él no puede pedirte eso
      - Prefiero estar lejos de ambos por el momento - solloza
      - Natalia - respiro dos veces para ser lo mas claro con ella. - Nosotros no somos amigos, se que ahora tengo a tu amiga, casi hermana viviendo conmigo debido a los acontecimientos. Pero no puedes alejarte de ella por un hombre. ¡Demonios! Ni siquiera debería planteartelo, fue su amigo quien cago todo. Y no tienes por que. Escuchame bien. No tienes por que pagar tu las consecuencias -
      - Es que no lo entiendes - solloza - Yo le amo. Le amo tanto como a Nata, pero él siempre será amigo de Iñaki - de solo escuchar su nombre gruño - No lo dejara por mi, ni por nada. Ya me lo dejo muy claro. Pero tampoco me quiere perder a mi. ¡No se que hacer! - la ultima parte la termina gritando
      - Ay! Naty. Tú amiga te necesita, tú la necesitas. Siempre se han apoyado la una en la otra, no te puedo decir nada más. No puedes dejar que un hombre las separe y tal vez Imanuel te ama, pero lo que ese cerdo, Idiota le hizo a mi mujer no tiene nombre -
      - Ya lo se y yo tampoco se lo voy a perdonar jamás. - resoplo - Ya se donde se esta escondiendo
      - ¿¡Donde!? - gruñi, esto si era una buena noticia.
      - En una cabaña en la costa. No se la dirección. - me dice dudosa
      - Gracias al cielo ya puedo dar con él. -

Seguimos hablando por unos minutos mas tratando de hacerla entrar en razón no pueda estar alejada de su hermana por culpa de un hombre que no lo vale, si la pone entre la espada y la pared no vale la pena.
Por otro lado necesitaba saber donde quedaba esa cabaña asi que mientras hablaba con ella revisaba el móvil de Nata para sacar información, sabía que habian ido juntos a ese lugar cuando yo me fui por un mes, pero no le podía pedir la dirección a ella. La mataria. Pero antes yo necesitaba arreglar un par de cuentas con él.
Di vuelta el teléfono y no encontraba nada, mi tranquilidad se estaba acabando. Si había alguien que sabia esa era Roxi, ella sabria donde estuvo su jefa. Necesitaba contactarme con ella.

      - Se te perdió algo en mi móvil - me pregunto mi amor aparareciendo de la habitación, frunciendo el ceño - Andas cotillando mis cosas
      - Estas hermosa mi vida - le dije acercandome hacia ella. No bestia nada del otro mundo, unos jeans con una camisa transparencia blanca con claramente sostenes negros. Ese contraste me hizo perder la mirada en sus pechos, sus grandes pechos que me tenian un poco loco.
      - Mañana tendré que ir de compras - me informa tapando sus pechos con sus brazos, le hice un puchero - Los sostenes me quedan un poco apretados - me dijo sonrojandose
      - Hmmm... Tienda de lencería. Me apunto para acompañarte - le dije dandole la mano y acercandola a mi cuerpo - Podríamos aprovechar de comprar unas bragas y de esas cosas que se ponen en las piernas -
      - Medias? - me dice alzando una ceja. Negue con la cabeza - Ligeros?  - una sonrisa salio en mi cara y los ojos de ella me miraron con aprobación, sus labios rozaron los mios - Mañana vamos entonces

Nos perdimos en nuestros besos durante un buen rato, sus manos recorrieron mi cuerpo y encontraron alguien que la llamaban a gritos, mi erección estaba esperando su atención. Tomo entre sus manos la cabeza de mi pene y lo masajeo de arriaba a bajo, mientras sus labios seguian pegados a los mios, me gustaba esta Renata desinibida con respecto a nuestra sexualidad, somos una pareja, un futuro matrimonio y ella me volvia loco.
La arrastre contra el sofá y la obligue a soltar mi miembro. Recostandola suavemente sin dejar sus labios lejos de los míos.

      - Te amo - susurre contra su boca - Pero debemos parar
      - Cenemos acá, te necesito mi amor - dijo mientras dejaba mi boca para descender besos por mi cuello
      - Hmmm... Vamos terminemos esto luego. - dije separandome de su lado - Él te esperará dispuesta luego amor - acote mirando mi miembro, me doleria la erección mas tarde pero nuestros amigos nos esperaban
      - Un último besito mi amor - dijo haciendo pucheros

La bese una ultima vez, le ayude a arreglar su ropa y salimos del departamento en dirección al restaurant.

      - Ya era hora que llegaran los tortolos - dijo Gabriel con una gran sonrisa a la entrada del local
      - Se ven muy bien juntos, los felicito de corazón por la boda - estreche mi mano contra la de Mariano y lo acerque para darle un abrazo sincero. - Hazla feliz - me dijo contra mi oído - Muy feliz.
      - La hice, la hago y la haré siempre feliz. - dije en respuesta
      - Ahora bien, Nata ven para felicitarte - la abrazo por un momento y ella respondió el abrazo.

Podía ver la sonrisa en su rostro, no era forzada. No lo era para nada, estaba feliz en este momento y me alegraba mas saber que lo hice por ella nuevamente. Logré sacarla de un mal momento.
Pasamos a comer unas exquisitas pastas italianas exportadas, el chef tenia el acento pero según Nata jamás en su vida había pisado Italia. Eso le hacia mucha gracia, conversaba acerca de todo y de todos en la mesa, cuando le pregunto a Gabo por la niña, le dijo que se había quedado con su madre y la madre de Mariano en el apartamento. La cara de mi amor fue muy graciosa en ese momento no lo podía creer, pero Mariano le aseguro que estaría bien cuidada.

      - Y ya tienen fecha? - pregunto Mariano ofreciendole una copa de vino a Nata, quien la acepto de inmediato
      - Si, a la mañana siguiente fuimos a pedir la hora al registro civil y esta semana nos entregan los partes de matrimonio. -
      - Nata, querida y la recepción la podemos hacer en mi restaurant - dijo Gabo - Claro si les parece bien
      - A mi no me mires que el encargado de buscar local es tu amigo - dijo Nata dejandome la responsabilidad a mi,

Habíamos acordado que la boda la organizariamos entre los dos, ella se encargaria del banquete, las flores su vestido y esas cosas de mujeres. Y por otra parte a mi me tocaba el local, recoger y repartir las invitaciones ademas de ver la luna de miel, pero ella esa parte no la sabia ya que no se lo había comentado. Tampoco teníamos tanta gente invitada, solo mi madre que viajaba del caribe, una hermana de mi madre a la que ella quiso que invitara. Un gerente con el cual somos muy amigos de Barcelona, los amigos de Nata de acá que se resumen a Naty (su testigo. Según me comento acá no se usan las damas de honor) Roxi, Andrea, Gabriel, Mariano y wooow esos serían casi todos nuestros invitados verdaderamente sería una boda privada e intima. Me agrada.

      - Benjamín - Mariano me saca de mis pensamientos - Ahora que no esta Nata, me quieres explicar que fue lo que paso en su departamento -
      - Woow - dijo - Espero decirtelo a grandes rasgos y que no se hable mas de eso -
      - Tranquilo. Solo quiero matar al idiota que la golpeo - dice Mariano
      - Ya somos 3 - acota Gabriel
      - Yo solo puedo. - dijo resoplando - Ya se donde encontrarlo y mañana iré a cobrarme lo que le hizo